Las redes sociales suponen una oportunidad increíble, como ya sabemos todos, para todo tipo de empresas y profesionales, sean del tamaño que sean.
Pero, como no podía ser de otra manera, también tiene su cara negativa. Entrar en las Redes Sociales sin un plan predeterminado o, lo que es lo mismo, con una mala estrategia, puede provocar a nuestra marca grandes daños para los que tenemos que estar preparados.
Por ello, lo mejor es seguir el sentido común y seguir el código que éste nos dicta.
Vayan aquí algunos consejillos:
1. Sumergirnos en el ecosistema social con un plan debajo del brazo: para un recién iniciado en el mundo dospuntocero, todos los recursos y posibilidades que ofrece pueden resultar un poco agobiantes y estresantes al principio. Precisamente por ese motivo, debemos conocer cuáles son esas posibilidades y cuáles son las mejores opciones para nosotros. Necesitamos saber qué, cómo y cuándo llevar a cabo cada táctica.
2. Establecer objetivos realistas a medio- largo plazo. No podemos olvidar una cosa: no se consigue el éxito en Social Media por arte de magia. Debemos ser conscientes en todo momento que necesitamos establecer objetivos alcanzables, realistas, a medio- largo plazo, ya que el trabajo debe ser continuado pero sin ser apresurado.
3. Crea tu voz y mantente firme en tu personalidad. En Social Media es necesario diferenciarse debido a la gran cantidad de competencia que hay en todo el ecosistema social. La mejor forma de destacar y de crear nuestra voz es diferenciándonos creando una voz fuerte y siendo absolutamente coherentes con ella, tanto en los mensajes que enviamos como en la forma de actuar.
4. El contenido es el rey, no lo olvides. Necesitas generar y compartir contenido de calidad si quieres que tu voz sea escuchada. El contenido es lo que te va a posicionar como alguien relevante o prescindible. Aprovecha la oportunidad.
5. Escucha a tu comunidad y participa de ella y con ella. Como ya sabemos, antes de hablar hay que escuchar. Permanece atento a lo que tu comunidad quiera decirte y, cuando los conozcas, habla con ellos, participa en sus discusiones, propón temas acerca de los que discutir. Tu comunidad está formada por muchos usuarios. Aprende de ellos, seguro que tienen mucho y muy interesante que contarte.
6. No tengas prisa. Sé paciente y, como dice el refrán, “vísteme despacio que tengo prisa”. Realiza tu labor concienzudamente, y no pretendas que los usuarios hablen contigo en cuestión de días: es imposible que hablen contigo sin conocerte, y no cometas el error de pensar que por lanzar contínuas actualizaciones vas a ser más visible y lo vas a conseguir antes, de esa forma serás visto como un spammer. La construcción de una comunidad es un proceso que requiere su tiempo, no te impacientes.
Obviamente, hay muchos más consejos que se pueden seguir a la hora de establecer nuestra presencia en redes sociales.
¿Se te ocurre alguno más?