Los que ya me conocéis sabéis que soy una fiel defensora de la importancia de los contenidos en todo el ecosistema digital, por supuesto en las páginas webs y blogs y en las redes sociales.
Los contenidos son la gasolina que impulsa a una marca en internet Share on XAsí de simple. Igual que la gasolina es el combustible que mueve a una moto o un coche, el contenido es lo que hace que una marca o una empresa sea de interés para el usuario. Sin contenidos (propios), una empresa puede estar proporcionando información interesante y relevante para su usuario, sí, pero al no ser suya está promocionando a marcas que pueden ser de su competencia.
La cosa es, ¿no es mejor que ya que vamos a tomarnos la molestia de buscar info de calidad y que pueda tener algún interés, esa información sea elaborada por nosotros? No sé, pregunto yo…
Ya no me valen las excusas de que crear contenidos requiere mucho tiempo y que no funciona. Te compro lo de que requiere tiempo, pero no lo de que no funciona. Además, si no te da la vida para crear contenidos, por suerte hay profesionales como yo misma que te pueden echar una mano creando contenidos de calidad bien estructurados y enfocados a conseguir los objetivos que persigas.
Si los contenidos no funcionan, ¿por qué todos queremos que los nuestros sean los mejores? Share on XTe digo más: mola que tengas contenidos de calidad para convertir, pero necesitas también un soporte donde colocar esos textos. Lo suyo es que tengas un blog o una página web con un buen aspecto y con una buena organización, y, aunque hoy en día es muy fácil crearnos un WordPress facilito, si ves que no te apañas bien un buen diseñador web freelance siempre puede acudir al rescate. Yo a mi diseñador web de cabecera lo llamo Capitán WordPress, pero no os voy a decir quién es, que luego me lo ocupáis.
Pues eso, que los contenidos son fundamentales para enviar un buen mensaje al usuario pero un diseñador te puede ayudar a optimizarlo aún más todavía, pues un profesional de estas características le va a dar el toque visual que necesitas.
Te pongo un ejemplo más claro: quiero poner en mi blog una serie de tarifas de servicios, pero aunque tengo una idea más o menos aproximada de cómo quiero hacerlo, del aspecto que quiero que tenga, un diseñador me puede decir que lo haga de una u otra forma. O incluso cuando tienes una página web, el diseñador puede darte un feedback muy importante acerca de los mejores lugares (visualmente hablando) para colocar esos contenidos tan molones.
La arquitectura de la web es muy importante a la hora de saber cómo repartir la información en tu sitio, y nadie como profesional para echarte una mano con ella.
Como decía Suárez, el presidente de la Transición, puedo prometer y prometo que los contenidos de calidad y el diseño web no son buenos aliados, sino que son los mejores amigos. Yo no entiendo el uno sin el otro, pues ambos son una forma de comunicarse con el usuario y el cliente.
¿Qué opinas tú?