🔺Me voy a poner un poco nostálgica para empezar el post de hoy recordando esos días de MySpace que ahora parecen tan lejanos. No sé a ti, pero yo tenía colgadas grabaciones con mi banda de música, y recuerdo que por aquél entonces, recibía al día un montón de peticiones de amistad de gente que ni conocía ni iba a conocer en mi vida, pues eran de la otra parte del mundo.
De hecho, aunque ya no tengo aquel perfil en MySpace, parece que Facebook ha recogido el testigo de esas peticiones de amistad, y la verdad es que puede ser un poco molesto recibir solicitudes de gente que te entra así:
[Tweet “”Hola, sexy. He visto tu foto y me ha encantado””]
Venga ya, hombre. Si hubieses visto mi foto, no me habrías escrito…
Lo cierto es que estamos viendo que hay gente que agrega a gente para que su número de fans o seguidores crezca, pensando que ese número (que no es más que vanidad) los va a hacer personas influyentes. Pero, no es el caso.
[Tweet “Entérate: tener seguidores no implica ser influyente”]
Hay usuarios, y meto en el mismo saco a empresas, usuarios y negocios, que creen que el verdadero fin de las redes sociales es petarlo en cuanto a número de seguidores se refiere. Quieren muchos seguidores y muchos fans, ver que el numerito crece de forma brutal. Vale. ¿Y luego qué? Pues luego viene el pensamiento también equivocado de que con tantos seguidores ya han triunfado en la vida, que van a vender lo que sea como si fueran churros y que lo están haciendo de escándalo.
No, hombre, no.
La cuestión de todo esto es si esos seguidores o fans interactúan contigo y tú con ellos, y, por supuesto, si son usuarios conseguidos a lo bestia o si por el contrario están buscados, cuidados y mimados. Si son tu público objetivo y les interesa lo que tú estás vendiendo. A ver, seamos sinceros, todos somos un poco vanidosos, y mola mucho ver que tu número de seguidores o fans crece, pero, ¿de qué vale si no interaccionan contigo? ¿Los quieres solamente para fardar? Pues entonces, no gastes tiempo en hacer follow y unfollow, cómpralos, que por muy poco dinero puedes conseguir mogollón de ellos. Aunque te digo que no te van a valer para nada.
Cuando se trata de evaluar y medir lo efectiva que es una campaña de marketing en social media es imprescindible analizar cuál es el nivel de influencia en comparación con los seguidores que tiene una cuenta. Siempre lo he dicho:
[Tweet “Es mejor tener 200 seguidores que interactúen que 2000 que no lo hagan.”]
Sí, porque ellos serán los que comenten, los que retuiteen, los que compartan el contenido que tú publiques en cualquier zona de tu ecosistema social, digamos, no son usuarios- jarrón. Piensa que, a nivel profesional, lo que quieres es que las redes sociales sean una herramienta para darte a conocer e impulsar tus ventas, ¿no?, entonces, si a los usuarios que te siguen les importas tú y tu mensaje menos que una patata frita, ¿para qué los quieres?
Las redes sociales son un arma marketiniana alucinante para empresas de todos los tamaños, pero si lo que quieres es juzgar la fuerza de tu perfil, lo que tienes que mirar es la influencia que tienes y cómo interactúan contigo los usuarios y dejarte de números, que para eso ya están los matemáticos.