No cabe duda de que el Big Data es una herramienta a tener en cuenta para las marcas y empresas que quieran sacar más beneficio a sus usuarios, y que, según los estudios, cada vez está cobrando más importancia.

Con la gran cantidad de Big Data que existe, es difícil saber con seguridad cuántos datos podemos tener a nuestro alcance, de dónde vienen y cómo podríamos utilizar ese Big Data en el día a día de la empresa para ahorrar costes e incrementar el valor de la misma.

Según A History of Storage Cost, escrito por Matthew Komorowsky, se prevé que para el año 2020 existan más de 40 zetabytes en datos disponibles para aquellas empresas que sepan aprovecharlos adecuadamente, datos que permiten tener un mayor conocimiento de los usuarios en todos los ámbitos que podamos imaginar, desde cuáles son sus preferencias hasta sus necesidades.

Ahora bien, ¿qué ha contribuído y está contribuyendo a esa explosión de datos?

Un factor importante a la hora de analizar este tema es la existencia de más de 1 billón de smartphones en todo el mundo, lo que posibilita que las conexiones a internet y, por tanto, esos datos, se multipliquen de forma importante, no estando sujetos, simplemente, al uso de ordenadores por parte de los usuarios. Igualmente, se prevé que para el año 2016 el 80% de los coches en todo el mundo se podrán conectar a internet, y, por lo tanto, enviar datos.

Antes mencionábamos que Komorowsky afirma que en el año 2020 más de 40 zetabytes estarían disponibles en datos en todo el mundo. Para que lo veamos más claro, podríamos decir que si un grano de arena equivaliese a un byte en datos, 40 zetabytes sería el equivalente a toda la arena que existe en todas las playas del planeta entero.

Otro factor determinante será el coste del almacenamiento, que será menor. Así, en el año 1981 costaba aproximadamente 300.000 dólares almacenar 1gigabyte de datos, mientras que actualmente, el precio es inferior a 10 centavos, según Komorowsky.

Esto es algo muy positivo porque más cantidad de información puede ayudar a alcanzar mejores beneficios para la empresa. El feedback en tiempo real procedente de puntos de datos se puede utilizar para dirigirse a los clientes, convirtiéndose en disparadores automáticos en base a los datos en tiempo real puede ayudar a aumentar la posibilidad de una conversión. Cabría señalar a modo de ejemplo el uso de códigos de descuento dirigidos a los consumidores cuando pasan junto a una tienda.

Esta práctica ahorrará costes y añadirá un valor importante a la empresa. Por ello, los partners tecnológicos pueden ayudar a interaccionar con los datos y a entender las principales tendencias tecnológicas, además de permitirnos aprovecharnos de su experiencia y experticia, ya que es algo que no podemos hacer por nosotros mismos.

Como conclusión señalaremos que el uso del feedback inmediato puede proporcionar conocimientos que ayuden a mejorar la producción o a corregir problemas potenciales antes de que ocurran, protegiendo nuestra marca y reputación.

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