Ya seamos profesionales que trabajamos en una empresa o bien estemos desarrollando nuestra propia marca personal, hay un factor fundamental a la hora de tener éxito: la relevancia y la capacidad de influir en los demás.

Esto es lo que nos proporciona la Autoridad Social, la posibilidad de crear una gran comunidad en la que seamos nosotros el centro, en la que podamos tener una voz fuerte que los demás escuchen, eso sí, sin imponerla. Tener autoridad significa mucho más que tener una masa de usuarios que nos sigan, que nos escuchen. Implica que nuestro mensaje influye de forma positiva en los demás, que tiene mucha fuerza, y eso es lo que tenemos que aspirar a conseguir.

La autoridad social conlleva influencia, y, a su vez, una gran responsabilidad. No podemos olvidar jamás que son los usuarios los que deciden si nuestro trabajo merece o no la pena, son ellos precisamente los que nos proporcionan esa autoridad, por lo que nos debemos a ellos en tweets y alma.

Otra consecuencia que conlleva el hecho de tener autoridad es un mejor posicionamiento SEO, puesto que al escucharse con una voz más fuerte nuestro mensaje en blogs o webs, los motores de búsqueda como Google también lo escuchan mejor y se hacen eco de ellos.

La lealtad de los clientes es otra consecuencia de tener autoridad, los usuarios confían en tí si les demuestras que pueden hacerlo porque vamos a estar ahí para apoyarles, ayudarles y resolverles cualquier duda, pregunta o problema que se les pueda plantear. Conectarán con nosotros mediante los distintos canales que tengamos abiertos para ello. Por nuestra parte, mostraremos nuestro compromiso con el usuario dando lo mejor de nosotros, proporcionando información interesante en todo momento y facilitando el acceso a nosotros mediante los canales. Esto dará como resultado una relación plasmada en interacciones mutuas.

De ellas se genera, según como gestionemos estas interacciones, familiaridad, cercanía, compromiso y, por ende, confianza por parte de los usuarios, y cuanto más interactuemos, mejor será esta relación.

Tener autoridad social significa que compartimos un valor añadido que nos diferencia, para lo cual encontramos una gran herramienta en las redes sociales, en todos y cada uno de los canales en los que tenemos presencia, lo que nos hace únicos.

La autoridad social también genera credibilidad en el usuario, lo que debemos reforzar siendo sinceros y honestos en todo momento. No nos engañemos, no es tan fácil, requiere muchísimo trabajo.

Gracias a la autoridad que se derivará de todos comportamientos, conseguiremos posicionarnos fuertemente en nuestro sector, ser reconocidos por otros influencers e impulsarnos en los medios sociales.

¿Ya lo pones en práctica?