No, no es el grito de Buzzlight Year en Toy Story.
Es un hecho.
Lo cierto es que las redes sociales nos ofrecen la oportunidad de que nuestro mensaje llegue más lejos de lo que nosotros mismos podemos prever, y eso se consigue logrando que nuestro contenido se difunda y se comparta adecuadamente.
La viralización no es más que la difusión del contenido que nosotros compartimos mediante “la compartición” también por parte de otros usuarios cuando este llega a sus manos, y para eso necesitamos que sea relevante y atrayente. El contenido se hace viral cuando cuando obtienen tweets y retweets de otros usuarios, cuando son enlazados o buscados en internet.
Las estadísticas que nos dicen si un contenido ha sido viral o no son, por ejemplo, los clicks externos e internos, el total de visitas, el tanto por ciento del impulso que ha tenido por parte de otros usuarios, el tráfico que ha generado, o cuántas veces se ha compartido, y, con estos datos tendremos una idea muy acertada de la aceptación que ha tenido nuestro contenido.
Podemos utilizar internet para ser virales. Las redes sociales nos proporcionan el caldo de cultivo perfecto para que nuestro contenido se difunda rápidamente, debido a la multitud de plataformas existentes en las que compartir nuestro material y la cantidad de usuarios presente en cada una de ellas, pero, para ello, es necesario compartir y crear contenidos que sigan unas ciertas “reglas”, ya que de lo contrario, nuestro contenido no tendrá difusión alguna.
Debemos esforzarnos por hacer comentarios únicos que se diferencien del resto, para que así tengan relevancia, porque esa es la clave, ser relevantes para ser virales.
El tweet viral debe tener un título llamativo que atraiga la atención, además de contener una breve descripción, una foto provocativa, un toque de humor y, si podemos añadir una lista, mejor. Nos encantan las listas.
No debemos caer en el error de pensar que sin enganchar a nuestros usuarios, el contenido se va a viralizar muy bien, simplemente, porque creamos que el tema resulta interesante. A veces es necesario ser un poco transgresores para conseguir diferenciarnos, aunque sin excesos, puesto que nos puede pasar factura, y no tardaría mucho.
La viralización es la mejor arma para llegar a todos aquellos clientes potenciales que podemos conseguir para nuestra marca, hasta el infinito y más allá.