La comunicación es un elemento imprescindible en todos los aspectos de nuestra vida, ya sea personal o profesional, puesto que en ambos ámbitos es necesario relacionarse con los demás. Tenemos que comunicarnos. Es una necesidad inherente al ser humano.
No obstante, lo digital y las nuevas tecnologías han cambiado sustancialmente la manera en que nos comunicamos: hace unos años usábamos la carta, posteriormente utilizábamos el teléfono como forma primordial de comunicación, y ahora, lo que priman son las redes sociales y los medios digitales.
Este cambio en la forma de comunicación ha generado un cambio en las personas, pero también la forma en la que los negocios, marcas y empresas llegan a sus usuarios.
Para realizar una buena comunicación es necesario tener en cuenta algunos aspectos importantes: es imprescindible comprender a nuestra comunidad. No debes comenzar un proyecto sin antes entenderlo adecuada y perfectamente: preocuparte por conocer los intereses de tu comunidad, conocer y comprender su comportamiento, la forma en la que se quieren comunicar con nosotros y analizar si les permites hacerlo. No te puedes basar en supuestos, sino en conocimiento.
Sal de tu zona de confort, o si lo prefieres, no te quedes en un lugar cómodo para tí, porque fuera de esa zona es donde se llevan a cabo las mejores acciones. Realizar la comunicación que sea mejor para ti no es hacer lo mejor para tus usuarios, que al fin y al cabo, son los que verdaderamente importan si quieres conseguir que tu marca tenga relevancia. No hagas la comunicación con la que te sientas cómodo, comunícate con tu comunidad y tus usuarios de la manera que ellos te demanden, asimílate tú a ellos, no al revés.
El verdadero problema de hacer las cosas “a tu forma” es la más que probable posibilidad de que los usuarios no lleguen a conectar contigo. Ellos demandan que te dirijas a ellos de una manera que les guste y que comprendan bien, en la que te sientan cerca, y es que no todos los usuarios son iguales, por lo que es importante que te fijes y te centres en lo que quieren ellos, no en lo que quieres tú.
El contenido es imprescindible. Contenidos, contenidos y más contenidos, esa es la cuestión. Piensa un momento en el contenido que compartes: ¿es relevante e interesante para la comunidad? Si fueses un usuario, ¿volverías a por más?
Aunque internet es perfecto para conectar con tu usuario, debido a la gran cantidad de contenidos que se comparten, la relevancia del mismo es un factor clave.
También es importante ver si la forma en la que te comunicas es tan efectiva como esperas y necesitas, si cumple tus objetivos, y para ello, nada mejor que las métricas.
Acóplate a tu comunidad sin olvidar que la comunicación es la clave.