Ya sabemos que el ecommerce tiene mogollón de ventajas por las que es la forma preferida de hacer compras de cada vez más gente. Por ese motivo, cada vez son más empresas las que se lanzan al entorno digital para lograr llegar a sus clientes. Y lo bueno es que con una tienda online puedes llegar a todo el mundo, a un mercado muy global.
¿Cómo puedes aumentar tus ventas?
Vivimos, como bien sabes, un momento en el que existen muchas opciones para realizar compras en internet pero es necesario asegurarte de que cuando realizas una lo haces en una web segura, que cumple todos los estándares. Para una marca es imprescindible que sus usuarios confíen en ella, sobre todo, si aspira a vender.
¿Cómo conseguir que el usuario confíe en tu tienda online? Con el Branding Share on X
Para conseguir tu objetivo y conseguir muchas más ventas tu arma secreta es el Branding.
Imagen de marca y comercio electrónico
En general, en internet, si eres una marca que no vende online como sí que tienes una tienda, es fundamental la credibilidad. La credibilidad la consigues creando una imagen de marca, coherente y creíble. Fuerte y potente.
Esta imagen de marca, el branding, es lo que te hace creíble de cara al usuario, lo que le proporciona la confianza necesaria para que pueda realizar sus compras en tu tienda. Y por eso es tan importante.
La creación de imagen de marca busca, fundamentalmente, crear una identidad bien definida y fácilmente reconocible tanto por tus clientes como para los que pueden serlo, identificándote con una gran cantidad de valores apreciados por el usuario. Además, también permiten mostrar que eres diferente de tu competencia, lo que implica un mucho mejor posicionamiento de la marca en su nicho, en los buscadores, y en la mente de los usuarios.
El branding es un cúmulo de elementos que crean una imagen coherente de ti, con tus valores, tu propia visión de la marca.
¿Cómo empezamos con el Branding en el comercio electrónico?
Lo primero que debes hacer es definir la voz con la que te vas a dirigir a tu público. ¿Cómo vas a conectar con él? ¿Qué tono vas a usar? La cuestión es responder a la pregunta qué marca quieres ser. Define estos parámetros y responde estas preguntas para empezar a trabajar tu imagen de marca.
Una vez has decidido cómo te vas a dirigir a él, debes definir muy bien cuál va a ser tu público objetivo, aunque realmente este sería el primer paso, no el segundo… No puedes hablar a alguien sin saber a quién. ¿No? Esto es importante porque dependiendo del público objetivo así te dirigirás a él.
Es muy importante también decidir en qué canales vas a estar presente. Esta presencia digital también determinará en gran parte tu imagen de marca, ya que no es lo mismo estar en Twitter que estar en Instagram. El lenguaje es diferente, y tienes que adaptarte.
Una vez empieces a trabajar tu imagen (imagen corporativa, colores, logo, tonos, mensajes…) es hora de medir los resultados y ver cuál es la percepción que tiene tu usuario de ti.